La búsqueda de los siete pescadores desaparecidos de la lancha ‘Bruma’, presuntamente colisionada frente a Coronel, concluye en medio de tensiones legales. La operación terminó con el hallazgo de restos metálicos de la embarcación a 350 metros de profundidad, sin señales de los tripulantes.
La dirigenta de los bacaladeros del Maule, Claudia Urrutia, indicó que la Armada confirmó a las familias la culminación de las labores de búsqueda. Los familiares mantienen su exigencia de realizar pericias al buque ‘Cobra’, sospechoso en la colisión, donde podrían hallarse más evidencias.
El buque científico ‘Cabo de Hornos’ apoyó las tareas de búsqueda mediante un mapeo del fondo marino, revelando un impacto probablemente mayor al estimado inicialmente.
En el ámbito legal, el gobierno presentó una querella por omisión de socorro, respaldada por el Ministro de Seguridad, Luis Cordero. Simultáneamente, las familias interpusieron una acción legal por homicidio con dolo eventual, lo que generó una respuesta del abogado de la empresa Blumar, Alejandro Espinoza. Espinoza aseguró que los radares del ‘Cobra’ no detectaron la ‘Bruma’ y cuestionó la validez de las querellas. Asimismo, mencionó que la tripulación del ‘Cobra’ escuchó ruidos durante la navegación nocturna, atribuidos a algo interno y sin relevancia. No obstante, afirmó que el capitán y la tripulación están tranquilos en cuanto a su actuar, aunque enfrentan presiones externas, como amenazas de muerte y hostigamiento.
