El entramado del caso Penta sigue mostrando nuevas aristas con la declaración reciente de Carlos Lavín, uno de sus controladores históricos. Según su testimonio ante la Fiscalía Nacional, se reunió con Andrés Chadwick, exministro del Interior, en compañía de Carlos Bombal y Luis Hermosilla. Estas reuniones tuvieron lugar en el contexto de las investigaciones sobre el financiamiento ilegal de la política.
La investigación dirigida por la Fiscalía Regional de Arica se centra en las posibles implicancias de soborno, prevaricación y revelación de secretos. Entre los investigados se encuentran, además de Hermosilla y Chadwick, el exfiscal Manuel Guerra. Este último fue mencionado en conversaciones que mostraban una preocupación sobre cómo se manejaban los casos de financiamiento irregular vinculados a la UDI, en especial el caso que involucraba al senador Iván Moreira, desaforado por recibir aportes ilegales desde Penta.
En su declaración, Lavín aclaró que ni Chadwick ni Hermosilla influenciaron la estrategia jurídica del caso Penta, sosteniendo que “no tuvieron injerencia alguna en la defensa de nuestra causa”. Aseguró que los encuentros se dieron por iniciativa de Carlos Bombal, con el objetivo de recibir impresiones políticas sobre el caso en el momento en que estalló, alrededor de 2014.
Mientras tanto, Andrés Chadwick negó categóricamente cualquier tipo de interacción relevante con Manuel Guerra, a excepción de coincidencias fortuitas en algunas ocasiones. Guerra, por su parte, reconoce haber coincidido en almuerzos con Chadwick y Hermosilla, aunque no recuerda el número exacto de veces.
Otro protagonista de la saga, Carlos Délano, no refirió haber sostenido reuniones con Chadwick o Hermosilla, limitando su conocimiento de ellos a encuentros protocolarios realizados en el marco de actividades políticas con la UDI.
