En una reciente entrevista con ADN Hoy, el ministro de Justicia, Jaime Gajardo, abordó la crisis carcelaria que atraviesa Chile, destacando la construcción de nuevos recintos penales como una de las prioridades del gobierno. En sus declaraciones, Gajardo fue categórico: “La cárcel se va a construir”. La ampliación de Santiago 1, uno de los centros penitenciarios más críticos del país, se llevará a cabo para abordar la preocupante sobrepoblación que afecta a este recinto.
El ministro explicó que el plan contempla, en una primera etapa, la creación de 600 nuevas plazas, con una proyección final que llega hasta 1.600. “Es necesaria la ampliación porque tenemos sobrepoblación”, afirmó, y agregó que hay terrenos disponibles para llevar a cabo estos trabajos. Además, Gajardo subrayó que todos los sectores políticos han coincidido en la necesidad de expandir el sistema penitenciario del país.
En paralelo, el ministro mencionó que su cartera está trabajando en un plan de infraestructura más amplio, que incluye la construcción de nuevas cárceles en regiones desérticas de Chile. En este contexto, es evidente que la crisis del sistema penitenciario es un asunto complejo, que va más allá de las paredes físicas de las cárceles, planteando un desafío tanto a la seguridad pública como al respeto de los derechos humanos de los internos.