En un giro digno de una novela policiaca, el fiscal regional de Coquimbo, Patricio Cooper, defendió con vehemencia el allanamiento a la diputada Karol Cariola, realizado el lunes a las 7:00 AM. Parece que, para el Ministerio Público, el estado de salud de las personas es un detalle menor, incluso si acaban de dar a luz. Cooper argumentó que la urgencia de la diligencia era vital para no entorpecer la investigación del caso Sierra Bella. Ante las críticas por irrumpir en la vivienda de una parlamentaria recién salida del hospital, el fiscal dejó claro que nada detendrá a la justicia en su incansable búsqueda, ni siquiera una reciente maternidad. Al menos asumió la responsabilidad, como buen director de orquesta en este concierto de decisiones cuestionables.
