La reciente tragedia en Calbuco ha sacudido a la comunidad, revelando grietas preocupantes en el sistema de salud local. El fallecimiento de Emilia Pinto, una niña de apenas tres años, debido a una presunta negligencia médica, ha llevado al alcalde Marco Silva a tomar acciones legales. La pequeña fue llevada al Hospital de Calbuco en dos ocasiones por gastritis, pero fue enviada a casa sin un diagnóstico adecuado. Su condición se agravó mientras era trasladada al Hospital de Puerto Montt, donde tristemente falleció por una hemorragia abdominal durante el viaje en bus.
Este caso ha desatado una ola de críticas hacia el sistema de atención en el Hospital de Calbuco. Se han denunciado graves fallos en la atención médica, incluyendo la falta de un pediatra en el establecimiento, una situación que, según los residentes, requiere atención urgente. Además, los trabajadores del hospital han solicitado la renuncia del director, Diego Alonso, en respuesta al incidente que consideran como el resultado de una gestión ineficaz y negligente.
Ante la gravedad de los hechos, el alcalde Silva ha anunciado su intención de presentar una querella criminal para esclarecer las circunstancias que llevaron a la muerte de Emilia. Asimismo, se ha gestionado la incorporación de un pediatra en la comuna, un paso que se considera crucial para evitar futuras tragedias similares.
El caso sigue desarrollándose, con la comunidad expectante y exigiendo justicia para Emilia y mejoras significativas en la atención médica del hospital.
