El Presidente de Chile, Gabriel Boric, ha reflexionado sobre su gestión del descontento ciudadano durante su gobierno, subrayando que la ausencia de protestas masivas en su administración, similares a las de 2011 o el estallido social de 2019, se debe a un estilo de gobernar centrado en el diálogo y la institucionalidad, y no a la casualidad. En una entrevista con Tolerancia Cero de CNN Chile, Boric afirmó: “Que no haya el nivel de protestas del 2011 o el 2019 no es suerte, eso es gobernabilidad”.
Boric defiende un enfoque que prioriza la creación de acuerdos sociales dentro del sistema democrático. “Gobernabilidad es producir acuerdos sociales para canalizarlos institucionalmente y que las transformaciones se canalicen institucionalmente. Y eso es lo que la derecha, históricamente, ha demostrado que tiene poca capacidad de hacer”, expresó.
Además, el mandatario, quien tiene raíces en movimientos sociales, enfatizó su compromiso de integrar demandas de estos orígenes en su rol actual: “Tengo un rol distinto a los movimientos sociales de los cuales provengo, pero trato de incorporar parte de las demandas que vienen de ese mundo, entendiendo el malestar y no ninguneándolo”.
Como ejemplo, Boric mencionó cómo gestionó la protesta reciente de matronas que se oponían a un decreto del Ministerio de Salud. Enfatizó que su respuesta fue el diálogo, debatiendo la situación con las afectadas, en lugar de recurrir inmediatamente a medidas más estrictas.
Boric también contrastó su enfoque con el de administraciones pasadas, especialmente durante el estallido social de 2019, indicando que la primera respuesta de entonces fue la represión: “Los conflictos sociales no se solucionan ocupando como primera medida la fuerza pública”. Con este enfoque, el presidente muestra un compromiso claro hacia una gobernabilidad orientada al diálogo y la comprensión de las demandas ciudadanas.