El ministro Jean Pierre Matus, de la Tercera Sala de la Corte Suprema, se encuentra en medio de una controversia significativa relacionada con su supuesta inhabilidad en el caso del proyecto minero-portuario Dominga. Esta situación se ha intensificado tras la solicitud de nulidad de los recursos de casación presentada por el Servicio de Evaluación Ambiental, que señala una presunta falta de imparcialidad de Matus debido a su amistad con Marcelo Castillo Sánchez, abogado del sindicato involucrado en el caso.
El proyecto Dominga ha sido objeto de intensas miradas de parte de diversas organizaciones medioambientales, las cuales han recusado al ministro Matus, exigiendo su inhabilitación para así asegurar la imparcialidad del proceso judicial. La situación se complica aún más con la revelación de vínculos entre Castillo Sánchez y Andes Iron, que podría influir en la manera en que se discute el proyecto.
El caso Dominga ha generado un debate amplio en torno a la transparencia de los procesos judiciales y la importancia de la ética en las decisiones de la Corte Suprema. La situación subraya la necesidad de prácticas judiciales que eviten cualquier conflicto de intereses.