La ministra de la Mujer y Equidad de Género, Antonia Orellana, ha dado un paso crucial al presentar el proyecto de ley que permitiría la interrupción voluntaria del embarazo hasta las 14 semanas en la Cámara de Diputados. En una reciente conferencia de prensa, Orellana destacó la importancia de reabrir el debate legal sobre el aborto terapéutico, cuya ilegalidad se instauró hace 36 años mediante un decreto dictatorial.
En su intervención, la ministra dirigió un mensaje a las mujeres que han pasado por el proceso de abortar, enfatizando que el gobierno actual no las ve como criminales. Subrayó: “Ninguna mujer se embaraza para abortar”, sugiriendo que las circunstancias llevan a tomar decisiones que no deben ser estigmatizadas.
La iniciativa legislativa, que se conoce como #AbortoConPlazos, busca no solo legalizar sino también establecer un debate abierto sobre los derechos de las mujeres. Orellana invitó a un debate respetuoso, instando a quienes se oponen a no imponer vetos y participar activamente en la discusión.
El costo financiero del proyecto se ubica en torno a los 2.600 millones de pesos, basado en proyecciones preliminares debido a la clandestinidad actual de estos procedimientos. Orellana señaló la normalidad de dichos procedimientos en muchas partes del mundo, donde se llevan a cabo de manera ambulatoria y segura.
La ministra puntualizó que la urgencia del proyecto será evaluada según las deliberaciones en las comisiones del Congreso. Expresó su tristeza por la amenaza de vetos al debate, argumentando que si se tiene confianza en los propios argumentos, no debería haber temor a defenderlos públicamente.
