El presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva participó en la 9ª Cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), celebrada en Honduras. Esta cumbre marca un momento clave para revitalizar el rol de América Latina en el escenario global.
Gisela Padovan, embajadora y secretaria de América Latina y el Caribe del Ministerio de Relaciones Exteriores, destacó la relevancia que Lula siempre ha atribuido a la integración regional. Según Padovan, la Constitución brasileña promueve la colaboración con la Celac como parte esencial de su política exterior.
Durante los últimos años, la Celac experimentó un debilitamiento significativo, exacerbado por la salida de Brasil del grupo bajo el gobierno anterior. La vuelta de Brasil a la organización durante el mandato actual de Lula simboliza un renovado compromiso con la región.
Entre las propuestas destacadas para la cumbre está la elección de una candidata femenina única que se postule para la Secretaría General de las Naciones Unidas. Este prospecto surge ante el término del mandato del actual secretario, António Guterres.
Con la expectativa de abordar temas de actualidad, el encuentro concluyó con una declaración conjunta de los 33 países miembros y el traspaso de la presidencia del bloque regional a Colombia.
La Celac, fundada en 2010, es crucial para unificar esfuerzos en una región que cuenta con 670 millones de habitantes, lo que representa el doble de la población de Estados Unidos y abarca un vasto territorio comparado con Europa.