En un giro inesperado, el abogado Juan Carlos Manríquez, que defiende a la diputada Karol Cariola, ha salido al paso de las declaraciones del fiscal Patricio Cooper. En la reciente audiencia vinculada a la investigación por presunto tráfico de influencias en la que se ve involucrada la parlamentaria, Manríquez ha planteado serias dudas sobre la validez de las acusaciones. A pesar de que la audiencia fue objeto de atención mediática, el abogado destacó la decisión de retirar la nulidad procesal, enfocándose en el fondo del caso.
Durante su intervención, Manríquez argumentó que no existen suficientes elementos que respalden las imputaciones de tráfico de influencias. Además, se refirió a la falta de pruebas concretas, lo que llevó a su defensa a presentar nuevos antecedentes que, según él, desacreditan las acusaciones iniciales. Los informes policiales, que han sido la base de las acusaciones, también fueron objeto de críticas, pues el abogado señaló deficiencias que podrían poner en entredicho la veracidad de la investigación.
La controversia se vuelve aún más complicada dado que el allanamiento se realizó tras el nacimiento del hijo de Cariola, un hecho que añade una capa de sensibilidad a la situación. La defensa de la diputada busca no solo limpiar su nombre, sino también restablecer la confianza pública en su gestión como representante.
